Buenafuente se vuelve a ir un año más de vacaciones, pero esta vez sin dejarnos, al menos por lo que parece, con un sustituto a cargo del programa. Una lamentable noticia si tenemos en cuenta que cualquier programa que no sea reposición en los lates del verano es todo un logro.
El año pasado, Berto sustituyó sin demasiado éxito a Buenafuente en su programa, logrando generalmente cuotas no más allá del seis por ciento de share. Ahora, este verano LaSexta y El Terrat no parecen dispuestas a dar continuidad al formato y le darán vacaciones que, al menos espero que sirvan para darle un giro que nos aporte alguna novedad, y es que queramos o no después de tantos programas viendo lo mismo, la estructura ya llega a resultar un tanto cansina.
Lo que nos queda por comprobar es averiguar que pondrá la cadena del humor en su sustitución, aunque yo me atrevería a apostar por refritos del programa durante todo el verano, algo nada alentador y que espero que no ocurra. Eso sí, las alternativas tampoco parecen ser mucho mejores, y es que un nuevo pase de sus series repetidas hasta la saciedad o más maratones de crímenes imperfectos a mí, al menos, no me llama nada.
En fin, esperemos alguna sorpresa por parte de LaSexta, algo nada probable si miramos el historial de esta cadena y su poca tendencia a sorprenden en lo que a cuestiones de programación se refiere.
El año pasado, Berto sustituyó sin demasiado éxito a Buenafuente en su programa, logrando generalmente cuotas no más allá del seis por ciento de share. Ahora, este verano LaSexta y El Terrat no parecen dispuestas a dar continuidad al formato y le darán vacaciones que, al menos espero que sirvan para darle un giro que nos aporte alguna novedad, y es que queramos o no después de tantos programas viendo lo mismo, la estructura ya llega a resultar un tanto cansina.
Lo que nos queda por comprobar es averiguar que pondrá la cadena del humor en su sustitución, aunque yo me atrevería a apostar por refritos del programa durante todo el verano, algo nada alentador y que espero que no ocurra. Eso sí, las alternativas tampoco parecen ser mucho mejores, y es que un nuevo pase de sus series repetidas hasta la saciedad o más maratones de crímenes imperfectos a mí, al menos, no me llama nada.
En fin, esperemos alguna sorpresa por parte de LaSexta, algo nada probable si miramos el historial de esta cadena y su poca tendencia a sorprenden en lo que a cuestiones de programación se refiere.
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